POSICIONAMIENTO DE LA OFERTA HOTELERA DE LAS PROVINCIAS DE ESPAÑA. EL CASO DE LA PLANTA HOTELERA DE CÓRDOBA.

La gran polémica sobre si hacen falta incrementar o no la planta hotelera de una provincia dependerá en gran medida de las siguientes variables:

• El índice de pernoctación, o lo que es lo mismo, el nº de noches por turista. Variable que incluye  la vez el nº de plazas en relación al número de pernoctaciones y el nº de plazas en relación al número de turistas que nos visitan.
• El tamaño medio de los hoteles, es decir, el nº de plazas medio por establecimiento.

Aplicando el Coeficiente de Correlación (ver el cuadro de posicionamiento de más abajo), entre ambas variables nos da un resultado de de 0,95 sobre 1,00. Esto significa que el tamaño medio de los hoteles de un destino, influye muy considerablemente en el índice medio de pernoctación del mismo.

Si ahora queremos saber en qué grado influye, por un lado, el índice de pernoctación y por otro, el tamaño medio de los hoteles, ambos sobre el número de plazas del destino, aplicaremos el Coeficiente de Correlación para ambos casos y observamos que los resultados son muy semejantes, 0,77 sobre 1,00 en el caso del índice de pernoctación y 0,76 sobre 1,00 en el caso del tamaño medio de los hoteles. Si bien, la relación no es tan acentuada como anteriormente, sí podemos afirmar que existe cierta dependencia, es decir que ambas variables son bastante influyentes en la dimensión de la planta hotelera de un destino,  si bien es verdad que quedaría pendiente el análisis de más matices que  nos acercara a la explicación del número de plazas más equilibrado en función a la demanda.

El cuadro siguiente muestra unos datos muy curiosos sobre la estructura de la planta hotelera, ofreciendo unos posicionamientos de las provincias realmente asombrosos. Hay que tener en cuenta que el posicionamiento es diferente a estar por encima o por debajo de las medias nacional o andaluza, en nuestro caso. Eso sí,  los resultados de este cuadro podrían ayudar a generar expectativas de inversión sobre muchos destinos y preocupación en otros.

En el caso de Córdoba, teniendo una posición casi en la media de la tabla en cuanto al tamaño medio de los hoteles (puesto 24 de 52), sin embargo estamos en una posición por debajo  de la media en cuanto al número de plazas por cada 1000 pernoctaciones (puesto 32 de 52), aunque  por encima de la media del dato que ofrecen España y Andalucía . Incluso así, estamos en un posicionamiento mejor que Granada, Huelva, Sevilla, Cádiz, Málaga e incluso Madrid, provincias éstas y otras que también están por encima de la media nacional.

Un dato que nos puede indicar si Córdoba esta algo baja en número de plazas, es el hecho de que, estando en el puesto 44º de 52 respecto al índice de pernoctación, estamos en el puesto 51º de 52 respecto al número de plazas en relación al número de turistas que nos visitan, muy por debajo además del dato que ofrece la media nacional y andaluza. Esta situación siempre provocará saturación y overbooking en numerosas fechas del año,  coincidentes con puentes , eventos y congresos. Se puede uno imaginar el problema cuando Córdoba disponga de sus recintos congresuales y espacios de exposiciones. Ahora sería el momento de invertir y seguramente sea en hoteles de gran tamaño de 4 estrellas, preparados para cubrir estancias cortas pero numerosas. No olvidemos que Córdoba no es un destino vacacional.

Es comprensible que el hecho de sufrir un índice de pernoctación tan bajo, está derivando en una pérdida de oportunidad para generar inversiones hoteleras más dinámica ya que los empresarios temen que el grado de ocupación medio a lo largo del año no sea suficiente como para mantener una rentabilidad atractiva. Sin embargo, hay que recordar a estos potenciales inversores, que la demanda de pernoctaciones en Córdoba, en valores absolutos y relativos, va creciendo año tras año y es necesario darles cobertura. Además, como nos hemos referido antes,  los recintos de congresos y exposiciones están cerca de ser una realidad y la promoción del destino va ganando en eficacia, provocando un efecto de prescripción y fidelización imparable. Por todo ello, es necesario el fomentar, captar  y facilitar la inversión hotelera en nuestro destino desde ahora y no esperar a que nos venga, todavía más acuciado, un problema grave de escasez de plazas que impida el desarrollo del sector turístico en nuestra provincia. 

Por cierto, acabo añadiendo que,  si nos ajustamos a las estadísticas del INE, la diferencia del crecimiento entre la demanda de pernoctaciones y la oferta de plazas hoteleras de la ciudad de Córdoba, es de un 6% aproximadamente, tanto si la diferencia la calculamos en un periodo de 10 años (2015 – 2006), como si la calculamos respecto al ejercicio anterior (2015 – 2014). TRADUCIDO AL Nº DE PLAZAS, ESTO SIGNIFICA QUE SE ESTÁ PRODUCIENDO UN DÉFICIT DE UNAS 400 PLAZAS PARA QUE EL CRECIMIENTO ENTRE LA DEMANDA Y LA OFERTA FUESE EQUILIBRADO. Insisto en que si esta situación perdura, en pocos años podría haber un gran desequilibrio entre la demanda turística y la oferta de plazas.

Antonio Ramos Pemán