LOS PRODUCTOS TURÍSTICOS QUE DESESTACIONALIZAN EL TURISMO EN ANDALUCÍA
La Consejería de Turismo y Deporte de la Junta de Andalucía, y concretamente Turismo Andaluz, están haciendo un importante esfuerzo estos últimos años en crear marcas-producto que centren la promoción del destino de Andalucía en base a una segmentación turística determinada. Son estrategias muy acertadas, tanto para el turista nacional como extranjero, tendentes a la desestacionalización de la demanda, pretendiendo posicionar la marca “Andalucía”, actualmente ligada especialmente a la imagen de sol y playa, al resto de segmentos, especialmente el cultural.
En este sentido, están desarrollándose iniciativas como “Andalusian Soul”, “Andalucía, Tus Raíces” o “Andalucía, Huella Universal”. Sin embargo, estas iniciativas corren el peligro de estancarse en su desarrollo turístico sino se fomenta en el sector la necesidad de creación de productos específicamente empresariales y profesionales, fáciles de promocionar y comercializar, que sean singulares, diferenciadores, exclusivos, experienciales,…. Es lo que estaría pasando con las “Rutas del Legado Andalusí: Califato, Washington Irving, …”, la “Ruta Bética Romana”, etc., en los que sería necesario la implantación de estrategias para dinamizar la creación de estos productos más específicos.
Un ejemplo de buenas prácticas se puede encontrar en “Caminos de Pasión”, ruta muy bien gestionada en la que los touroperadores y agencias de viajes están viendo buenas posibilidades para su comercialización.
Podríamos considerar por tanto a estos grandes productos como Productos Turísticos Globales, que son aquellos los que en realidad compra el consumidor. Es la marca y el concepto de la venta de la motivación primaria del turista. Es el producto principal que se ofrece con enfoque de negocio, siendo aquello que brinda el beneficio principal. Estos productos globales están totalmente ligados a la imagen y marca del destino. Su éxito dependerá de forma directa a la buena gestión de esta imagen.
Sin embargo son los denominados Productos Turísticos Específicos lo que dan contenido económico real a los anteriores. Son aquellos que se construyen y desarrollan bajo la inspiración y marca de los Productos Turísticos Globales anteriores en función a la segmentación del mercado que decidamos.
Un segmento de mercado está compuesto por un número de consumidores que muestran un comportamiento de compra y consumo homogéneo. La segmentación de la demanda, es una forma de seleccionar el mercado al cual dirigir el producto a desarrollar. Algunas formas de segmentación y que a la vez se pueden combinar entre ellas, son:
- En función al segmento turístico (Turismo Rural, Turismo Cultural, Turismo de Negocios, Turismo de Naturaleza, Turismo Gastronómico,…)
- En función del origen geográfico (local, comarcal, provincial, regional, nacional, internacional).
- En función al tipo de consumo: Individual o en grupo
- En función de características demográficas (edad, género, estructura familiar, etc.)
- En función del estilo de vida, clase social y perfiles de personalidad.
Podríamos concluir afirmando que tanto los Productos Globales como los Específicos integran elementos tangibles (equipamiento para alojamiento, restauración, infraestructura de transporte, infraestructuras públicas) que suelen estar claramente definidos en el catálogo que se ofrece al cliente, conjuntamente con elementos intangibles (servicios, vivencias, emociones, hospitalidad) que representan un valor agregado que sólo dependerá de la percepción individual y subjetiva del turista.
Los primeros planteamientos para crear un Producto Turístico.
Un producto turístico no es más que el resultado de la puesta en valor de uno o varios recursos turísticos, ya sean tangibles como intangibles, combinando servicios profesionales y empresariales de la oferta turística ligada al destino, aprovechando los equipamientos e infraestructuras públicas.
- Antes de comenzar a planificar el desarrollo de un producto turístico debemos reflexionar sobre ciertas cuestiones básicas:
1º ¿Va a ser un Producto de nueva creación e inventado, que aún no exista? o ¿Va a ser un Producto ya existente del que queremos ampliar la oferta y variedad?
2º ¿Qué tipo y objetivo final de negocio queremos crear con el producto? Siempre tomando en cuenta que recursos dispone nuestra localidad o ciudad.
3º ¿Qué subproductos queremos ofrecer? Es decir, que servicios y recursos deben componer cada uno de los subproductos desarrollados.
4º ¿Qué hacer para que los productos puedan venderse? , es decir, elaborarlos adecuadamente y con la garantía de que satisfacerá las necesidades del turista al que lo queremos dirigir.
5º ¿Qué beneficios va a ofrecer?
6º ¿Qué población objetivo, localización potencial, atractivos, servicios y actividades podría incorporar?
- Los conceptos básicos que debemos tomar encuenta para crear un producto turístico serían:
- Los recursos turísticos del lugar. Son los recursos naturales, culturales, históricos, gastronómicos, etc., con los que cuenta determinado lugar y que tienen un potencial para el turismo.
- Servicios y equipamientos turísticos. Es lo que hace posible la permanencia del turista en el lugar.
- La accesibilidad. Tenemos en este componente a la infraestructura (carreteras, aeropuertos, estaciones de autobús, etc.) y a los tipos de transporte disponibles.
- La imagen del destino de venta. Puede ayudarnos a que el turista acepte el producto o lo rechace, es el principal factor que determina las expectativas de los turistas.
- El precio. Es lo total que paga el turista por los servicios y disfrute de sus actividades. El precio varía de acuerdo a la calidad delservicio, la distancia recorrida, las actividades realizadas, etc.
Ahora, que ya sabemos qué es un producto turístico, qué lo caracteriza y de qué está conformado, podemos hablar del proceso de elaboración o creación de productos en el marco de estas iniciativas de grandes productos de imagen y destino, que se están desarrollando desde la Consejería de Turismo y Deportes de la Junta de Andalucía y Turismo Andaluz.
ADEITUR
20 Agosto 2017